Por: Laura Espitia
Martes 20 de octubre del año 2020, tres mineros quedaron atrapados en el interior de la Mina de Carbón el porvenir 2 de la vereda de Santa Rita en el municipio de Tuta Boyacá, accidente que tuvo lugar a las 10:00 de la mañana y fue reportado a las 6:30 de la tarde.
Al día siguiente el desconcierto, la incertidumbre y el miedo se apoderaron de los familiares, amigos y conocidos, que iban llegando poco a poco alrededor de la mina. Transcurrían las horas y no se sabía nada de los tres mineros, no se tenía señal de vida de ninguno. Tambien llego el alcalde del municipio de Paipa y de Tuta, los miembros del Sistema Departamental de Gestión de Riesgo de Desastres: Defensa Civil, Cruz Roja, Bomberos y entidades operativas como Policía Nacional a través de sus efectivos y del Gaula, los miembros de la Agencia Nacional de Minería y la Cooperativa Minera llegaron a la mina donde se empezaron a realizar y a planear todas y cada una de las actividades de rescate.

Se empezaban a escuchar rumores de que posiblemente los mineros ya estaban muertos puesto que se encontraban a más de 40 metros de profundidad y la humedad de la mina disminuye las posibilidades de sobrevivir en un accidente de esta magnitud. Omaira la madre de uno de los mineros más jóvenes que se encontraban debajo de los escombros empezó a coordinar una olla comunitaria con el fin de proporcionar alimento a todos y cada uno de los mineros y demás personas que estaban trabajando sin descanso para poder rescatarlos con vida y también buscaba el modo de poder ocupar sus pensamientos y que el desespero no se apoderara de ella.
En horas de la tarde por medio de una de las mangueras se escuchó una voz, hecho que puede hacer volver el alma al cuerpo a cada uno de los familiares, amigos y conocidos, el saber que estaban vivos y que al parecer se encontraban en bien y sin lesiones, hizo que las esperanzas aumentaron y las ganas de trabajar más para lograrlos sacar pronto, ya que entre más tiempo pasa más riesgo hay de que su estado de salud se deteriore aún más este y todos los rescates mineros se podría decir que es una carrera contra el tiempo, donde este no es un factor de ayuda sino todo lo contrario un factor de riesgo potencial que disminuye la posibilidad de salir con vida.
Cuatro días de incertidumbre, desesperanza, temor pero también de ayuda comunitaria, donde se veía la empatía entre los habitantes cercanos a la mina, entre familiares y amigos; pero también mientras unos anhelaban volver a ver a los mineros que se encontraban allí, otros según rumores se podría decir que esperaban con ansias la muerte de ellos debido a herencias, rencores o disputas.
Finalmente después de tanta espera, discusiones entre mineros y los ingenieros, se llegó el momento tan anhelado de muchos lograron llegar a donde se encontraban los tres mineros el 23 de octubre del año 2020 en horas del mediodía salieron del hueco los tres mineros, aquellos mineros que lograron estar estables solamente con agua y con un almuerzo con el que había ingresado uno de los mineros. Omaira una de las madres de los mineros al ver a su hijo fuera de la mina dijo – me siento como si lo hubiera vuelto a ver nacer-, los recibieron como héroes entre abrazos y lágrimas finalmente terminó tanta espera, logrando vencer la carrera contra el tiempo.
– N.E
Video de la salida de los tres mineros. Tomado por uno de los mineros que ayudo en el rescate. Disponible en el siguiente link: https://youtu.be/FtMXv7iO7lI