Un“Grafiti” es un modo de arte visual callejero expresado mediante pinturas realizadas en superficies amplias y vistosas que en muchos casos no pueden ser destinadas para tal fin, por consiguiente su realización suele interpretarse como algo ilegal y clandestino. El origen del grafiti se remonta a la civilización romana, sin embargo su popularidad se arraiga a la cultura hip – hop que nació en Estados Unidos durante los 60’s y 70’s, período en el que el grafiti era el medio para que las tribus urbanas impusieran su territorialidad. Actualmente este tipo de obras pueden ser ya vistas como arte abstracto, mecanismos de protesta del pueblo, muralismo y medios de representación cultural.
Al recorrer la capital boyacense se puede ver como casi todos los muros han servido de lienzo perfecto para la realización de grafitis que suelen ser vistos como arte incómodo, pues cumplen con la intención de dejar huella al señalar aspectos difíciles de retratar; también se observan murales que son interpretados ya como representaciones artísticas de la cultura arraigada al territorio. Tanto grafitis como murales pueden entenderse como una forma de expresión mediante la apropiación de espacios que irrumpen con la arquitectura clásica que predomina en la ciudad.
En Tunja se encuentra la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia U.P.T.C, otro gran lienzo en el que los estudiantes realizan grafitis y murales con el fin de plasmar el sentido crítico hacia distintas problemáticas, plasmar la historia, la revolución y la meritocracia, por lo que sus muros pueden llegar a ser vistos como un repertorio de manifestaciones con un amplio sentido social, lo que finalmente también contribuye en el fortalecimiento de la identidad universitaria mediante la apropiación del entorno que realizan los mismos estudiantes.
A continuación, el vídeo anexado permite evidenciar de lo realizado en el «Congreso de Graffiti y arte urbano – 2018» en la ciudad de Tunja, todo por el colectivo Alta presión.